La mitad del territorio boliviano está situado en la Cordillera de los Andes a gran altitud (más de 3500 metros), lo que implica una buena condición física para llevar a cabo las visitas. En caso de problemas cardíacos o pulmonares, consulte con su médico, sólo él podrá aconsejarle.
Mal de montaña agudo:
El Soroche o M.A.M -Mal de Montaña Aguda- es un síndrome que puede aparecer durante una estancia en la altitud, agrupa diferentes síntomas que pueden aparecer por separado como dolores de cabeza, náuseas, tos seca irritante, vómitos, insomnio, vértigo y fatiga general. Un viaje a Bolivia inevitablemente requiere pasajes a grandes alturas, un simple consejo puede evitar este inconveniente. Una progresiva aclimatación a la altitud, especialmente antes del trekking o la escalada. Evite los esfuerzos durante la aclimatación. Hidratarse regularmente con agua o té de hierbas. Evite el alcohol y los cigarrillos durante la aclimatación. Puedes beber tés de hierbas hechos de hojas de coca.
Vacunas:
Excepto en la parte amazónica, no es obligatoria la vacunación. Sin embargo, es aconsejable consultar con su médico y pedirle que le recuerde las vacunas actuales.
Recomendamos un tratamiento preventivo para la malaria, sólo para los días que pasen en el Amazonas. No hay paludismo a grandes altitudes.
Sin embargo, la vacuna contra la fiebre amarilla es obligatoria en caso de paso por la selva amazónica (que podría ser nuestro caso).